FROOT probablemente es uno de los discos más esperados por la escena del indie pop, el tercer disco de Marina and the Diamonds se filtró hace unos días a la red por lo que su lanzamiento tuvo que adelantarse casi un mes, a pesar de que desde hace cinco meses se han ido liberando oficialmente canciones del disco.
A nivel general FROOT refleja una Marina más madura, alejada medianamente de su sonido más electropop del disco anterior, Electra Heart y mucho más experimentado que en The family jewels, su debut. Para las sesiones de grabación, Marina se acompañó de una banda y no en sesiones independientes con lo que pretende que lo que suene en el show en vivo sea lo más parecido posible a lo que se escucha en el disco.
Debo decir que me encanta a niveles muy profundos, por una parte FROOT tiene un sabor melancólico a una relación que quedó en el pasado pero que no ha dejado de ser importante y por el otro, escuchamos a una mujer independiente, inteligente, con una voz auténtica y sobre todo lo que resalta un disco colorido, multi-sabor y que suena mucho más que antes a verdadero indie pop, que no teme hacer statements sobre la felicidad, la humanidad,el egoísmo y el amor.
Happy, el primer track, es una balada sincera, quedarte con el corazón roto sólo ofrece un montón de posibilidades para un nuevo futuro y ser feliz es sólo una de ellas, entiendes que aunque estés desesperadamente solo quizás eso sea lo único que necesitas. Esta misma emoción se repite en otros tracks como I’m a ruin, Blue o Solitaire y cada uno es tan auténtico como si fueran frutas diferentes, sensaciones agridulces, picantes, amargas y jugosas.
Los sentimientos evolucionan, no quieres vivir siempre triste y quizás uno puede extrañar toda la vida a una persona, el amor deja de llamarse amor y la libertad nos lleva a encontrar cosas nuevas, el pasado y el futuro se van mezclando en el ahora y uno usa eso para crecer, para olvidar y también para perdonar. Aún así a veces te desesperas, te arrepientes, te diviertes y quizás crees que lo necesitas es un hombre para que te dé el autoestima que no tienes.
FROOT le permite a Marina acercarse un sonido más rockero, bastante fresa pero que quizás se parezca más a lo que hace en vivo y esto podemos verlo en tracks como Forget, Better than that o una de las que más me gusta, Weeds, una power-ballad de esas que te quitan poquito el aliento con los lyrics, a veces crees que cortaste un amor de raíz pero crece como hierba en un jardín, es algo que quisieras dejar de sentir, pero despiertas cada día y no deja de crecer y se va enredando en todos los rincones de ti:
I miss all of my exes
They’re the only ones that know me
And God knows that sex is
A way to feel a bit, a little bit less lonelyExtraño a todos mis exes
Ellos son los únicos que me conocen
Y Dios sabe que el sexo es
Una manera de sentirnos un poco, un poquito menos solos.
En FROOT no todo es lamentarse por que el amor no pudo ser, Marina nos demuestra que también es una mujer versátil y que se permite sonidos dulces como en Gold o una actitud fuerte y decidida en Can’t pin me down. Marina reflexiona y se torna más oscura en Savages, cuestiona la naturalidad de asesinar, violar y lo que en el fondo somos, un montón de animales intentando comportarse, matando el tiempo que tenemos de vida con pretextos como el dinero, el sexo, las relaciones y todo ese lado brutal que se esconde tras el velo de lo civilizado.
Froot, tema que también fue el primer sencillo quizás sea lo más parecido a su sonido electropop, sin embargo tiene un sabor bastante divertido, la letra resulta sumamente perfecta para esta primavera y mientras uno se impacienta por el amor vive la dolce vita. Para el track de cierre, Immortal, Marina se vuelve imposible, deseando que nada tuviera un fin, ni siquiera ella misma, ni el amor y quizás lo único que pueda vivir para siempre sean los recuerdos y los sentimientos.
Ahora solo me queda vivir con la ciega fe de que este año Marina and the Diamonds sea una de las invitadas al cartel del Corona Capital o de otro modo sería un pecado mortal perderse The Froot Show. Por ahora, este es uno de los mejores discos que habrán nacido este 2015, Marina ha cosechado lo suficiente para ser considerada una verdadera artista.